Un reciente análisis realizado por un importante bróker del sector sobre la situación del mercado asegurador muestra que las duras condiciones actuales a las que éste se enfrenta persistirán durante todo el año 2021. El informe, que analiza las tendencias del sector durante el último trimestre de 2020 y el primero de 2021, arroja que las líneas de negocio más desafiantes serán las de Daños Materiales, Responsabilidad Civil, Directors & Officers (D&O) y Ciber riesgos.
Como señala uno de los directivos implicados en la realización del informe, “de cara a las renovaciones de final de año, que ya se están estudiando con los mercados de seguros, destacamos una creciente falta de apetito por los riesgos más complejos y por aquellos que arrastran un amplio historial de siniestros y acumulan pérdidas. De nuevo, la información y el tiempo son los factores más críticos para encontrar soluciones y posibles alternativas: los mercados van a tener cada día más temas encima de la mesa y van a tener que elegir cuáles se van a estudiar con recursos limitados.”
En cualquier caso, y aunque sin esperar un retorno rápido a los precios “blandos”, el bróker es más optimista con respecto a que, de no producirse nuevas catástrofes, los aumentos de las tasas comiencen a moderarse y sean más predecibles a partir de mediados del próximo ejercicio. Todo parece apuntar a que se empieza a ver cierta moderación hacia un nuevo equilibrio que proporcione a los clientes certeza y protección contra sus riesgos y la creciente volatilidad del mercado.
Suben los precios
En este marco global, el endurecimiento de los precios se generaliza y afecta a todo tipo de riesgos, incluidos los más benignos. Los incrementos más altos se seguirán viendo en sectores específicos como Alimentación/Bebidas, Energía, Manipulación de Residuos y Reciclaje, Industria Química, Automoción y en riesgos con Exposición Catastrófica. Por líneas de negocio, las predicciones respecto a los incrementos medios de precios que se observan para el último trimestre de 2020 y el primero de 2021, quedarían así:
- Daños materiales: incremento de entre el 15% y el 25%.
- Responsabilidad civil: incremento de entre el 7,5% y el 15%
- Construcción: incremento de entre el 5% y el 25%
- Energía: incremento de entre el 5% y el 30%
- D&O: incremento de entre el 15% y el 70%
- Responsabilidad civil profesional: incremento de entre el 5% y el 50%
- Ciberriesgos: incremento de entre el 20% y el 30%
- Crime: incremento de entre el 15% y el 30%
- Instituciones financieras: incremento de entre el 10% y el 30%
- Aviación-Aeroespacial: incremento de entre el 20% y el 40%
- Marine-Transportes: incremento de entre el 10% y el 40%
La disciplina en la suscripción persiste con suscriptores sobrepasados, en muchos casos, por el exceso de submissions que reciben. En este sentido, el bróker concluye que la información en el momento de estudiar y renovar los programas de seguros se convierte en un elemento clave para poder determinar la calidad de los riesgos. Además, la gestión proactiva de los riesgos, las medidas de prevención y el desarrollo de los planes de mejora a los que el cliente se había comprometido se están analizando con mayor detenimiento para considerar las condiciones de renovación.
Crecen las exclusiones por Covid-19 y Ciberriesgos
Otra de las conclusiones que arroja el estudio apunta a que en los últimos meses muchas compañías han anunciado la inclusión de manera ya generalizada de exclusiones específicas por Covid-19 en varias líneas de negocio, principalmente en las de Daños Materiales, Responsabilidad Civil y D&O, aunque algunas de ellas se siguen estudiando “caso a caso”. Se observa además un aumento de las nuevas exclusiones relacionadas con Ciberriesgos, principalmente en las pólizas de Responsabilidad Civil y Daños Materiales.
El análisis muestra también que las compañías de seguros mantienen una continua revisión de sus apetitos de riesgo, con el objetivo de controlar y limitar de manera mucho más minuciosa las exposiciones de sus carteras. En este sentido, en los últimos meses se han visto importantes retiradas de capacidad que obligarán a incrementar la retención de los clientes.
Por lo que respecta al área de siniestros, y aunque se empiezan a conocer las primeras cifras sobre el impacto que el Covid-19 está teniendo en la industria aseguradora, todavía existe mucha incertidumbre sobre el alcance total y la duración que tendrá esta catástrofe. En este punto, los analistas prevén un incremento de los siniestros rechazados y dificultades en los procesos de resolución de estos.
Líneas de negocio con mayores desafíos
Daños Materiales, Responsabilidad Civil, D&O y Ciber riesgos son, según el análisis, los sectores en los que el mercado asegurador se enfrentará a los mayores retos durante 2021. Las principales conclusiones en cada uno de ellos son:
Daños materiales:
- Aunque la mayoría de los mercados ya están aplicando medidas correctoras a los precios de toda su cartera de Daños, los ajustes se están analizando cuenta a cuenta en base a las características particulares de cada riesgo.
- Se están incorporando exclusiones específicas por Covid-19 para acotar claramente este hecho.
- Clara reducción del nivel de coberturas y de la capacidad local de los principales mercados. Cada vez más riesgos han de referirse a las centrales de suscripción, complicando y alargando los procesos de colocación. Se da también un aumento de la incertidumbre relacionada con la validez temporal de las ofertas, muchas veces limitada a 24 horas.
- Las limitaciones en las capacidades son cada vez mayores según la industria y la tipología de los riesgos. Los sectores más afectados son Alimentación y Bebidas, Automoción, Reciclaje y Manipulación de Residuos, algunas tecnologías del sector energético, Industria Maderera, Industrias Químicas y Real Estate.
Responsabilidad civil:
- Distintas aseguradoras están registrando ratios combinados que superan el 150%, lo que hace anticipar un entorno muy complicado hasta, al menos, la primera mitad de 2021.
- La capacidad mundial se ha reducido en un 35% entre 2018 y 2020 por la consolidación de operaciones de M&A en el mercado, retiradas de capacidad y limitaciones en los apetitos de suscripción.
- Persisten las restricciones de coberturas y se prevé mayor endurecimiento de los términos y condiciones durante los próximos trimestres. Las exclusiones que más importancia están teniendo son las de Ciber riesgos, Covid-19 y Enfermedades infecciosas.
D&O:
- Muchas aseguradoras han dejado de suscribir nuevo negocio de D&O por el incremento exponencial en el número de reclamaciones de los últimos años, agravado además por la crisis generada por el Covid-19. Este hecho está ocasionando serios problemas para encontrar capacidad, cerrar cuadros de coaseguro y capas de excesos en las grandes cuentas.
- Reducción general de la capacidad principalmente para los riesgos más complejos. En el mercado de Londres, varias compañías de referencia han puesto sus carteras en run-off con la intención de abandonar por completo esta línea de negocio.
- Los informes de siniestralidad y evolución de precios del seguro de D&O ponen de manifiesto que la tendencia al alza, tanto en siniestralidad como en primas, no ha tocado techo, esperándose un endurecimiento aún mayor en los últimos meses de 2020 y durante todo 2021.
Ciber riesgos:
- La capacidad para esta tipología de riesgos está empezando a reducirse de forma clara, ya que las pérdidas siguen aumentando y muchas aseguradoras han tomado la decisión de reducir ampliamente su capacidad máxima (de 25 a entre 10 y 15 millones de euros, como máximo).
- El teletrabajo ligado al Covid-19 ha conducido a un aumento de la actividad de phishing y hacking, llegando a provocar ataques cibernéticos con reclamaciones superiores a los 10.000 millones de dólares.
- Los mercados de seguros están introduciendo nuevos y estrictos controles de suscripción en respuesta al creciente número de siniestros declarados y están considerando la posibilidad de adoptar medidas adicionales.
- En medio de las crecientes pérdidas, las aseguradoras recurren cada vez más a la utilización de cuadros de coaseguros y al reaseguro facultativo para limitar y compartir el coste de los siniestros.